El clima frío solo complica más esta molestia común para las personas que sufren con frecuencia hemorragias nasales. Como ya es bien sabido, el invierno es una temporada difícil para la nariz. Pasamos de temperaturas extremas de frío, a altas temperaturas por la calefacción. Esto termina pasando factura a nuestra nariz con una hemorragia nasal.
¿Por qué se producen las hemorragias nasales?
Los cambios de temperatura resecan la nariz hasta el punto de que pueden ocasionar hemorragias nasales. Además, las congestiones o gripes generadas por el frío tienden a aumentar estos casos y a dañar nuestra nariz.
En el invierno, la mayor causa de las hemorragias nasales es la poca humedad, tanto en el aire frío del exterior como en el de la calefacción del interior. Mantener la nariz hidratada es clave, pero no siempre es fácil.
La membrana que recubre la fosa nasal y que está repleta de vasos sanguíneos termina sufriendo y basta con un simple estornudo o con rascarse la nariz para que un capilar se rompa y se provoque la hemorragia nasal.
La mayoría de las hemorragias ocurren en la parte frontal del tabique nasal. Este es el tejido que separa los dos lados de la nariz. Este tipo de hemorragia es fácil de detener para un profesional entrenado.
Con menos frecuencia, las hemorragias nasales se pueden presentar en la parte alta del tabique o en una parte más profunda de la nariz. Estas hemorragias pueden ser más difíciles de controlar. Sin embargo, las hemorragias nasales pocas veces son potencialmente mortales.
Las causas más frecuentes además de las ya comentadas son las alergias, tabique desviado, inhalaciones de medicamentos o fármacos irritantes, abuso de aerosoles nasales o sonarse con fuerza la nariz.
Las hemorragias nasales frecuentes pueden ser un síntoma de otra enfermedad, como presión arterial alta, un trastorno hemorrágico o un tumor de la nariz o de los senos paranasales.
¿Cómo prevenir las hemorragias nasales?
Para prevenir las hemorragias nasales es importante seguir una serie de consejos. En primer lugar, si te sangra con mucha frecuencia la nariz, lo mejor es acudir a un especialista para que evalúe tu caso ya que podría estar siendo un síntoma de otra enfermedad.
Si la hemorragia nasal se produce de forma puntual, será fácil prevenirla. Aquí te dejamos una serie de consejos que pueden serte de ayuda:
- Utiliza un humidificador para el ambiente, sobre todo cuando tienes calefacción.
- Si estás resfriado, utiliza una solución salina para aplicar en el interior de la nariz y una vez esté hidratada, suénate.
- Evita rascarte con fuerza la nariz. Podrías romper alguno de los vasos sanguíneos.
Si no has podido prevenir la hemorragia, lo primero de todo es que mantengas la calma. Siéntate o quédate de pie con la cabeza ligeramente inclinada hacia delante para no tragar la sangre. No tapones con papel la fosa nasal ya que lo único que hará es secar la sangre en el interior. Pellizca la parte de cartílago de la nariz usando una compresa fría durante aproximadamente 10 minutos. Solo así podrás frenar la hemorragia nasal.