El cuero cabelludo es la piel que recubre la cabeza y el lugar donde crece el pelo y su salud afecta directamente a la salud de todo el cabello, por lo que, si se ve mal, lo normal es preguntarse si hay un problema de base: ¿qué está pasando en el cuero cabelludo?
Lo bueno es que muchos de los problemas relacionados con el cuero cabelludo es que se pueden resolver de forma fácil y sencilla, simplemente cambiando algunos puntos de tu rutina. A continuación, te detallamos algunos cuidados básicos para mantener tu cuero cabelludo bien hidratado todos los días de la semana.
Aplica estos 5 cuidados básicos para lucir un cuero cabelludo sano y fuerte
Un pelo bonito y sano es reflejo de una persona sana. Si una persona tiene el pelo seco, con picor, irritado y nota tirantez en la raíz, probablemente se deba a que tiene el cuero cabelludo sensible. Altas temperatura, contaminación ambiental, exposición al sol, estrés, mala alimentación, cambios hormonales y uso inadecuado de productos capitales son algunas de las causas de sensibilidad en el cabello.
Todo esto lleva a una conclusión: el cuero cabelludo siente y, si no se cuida, derivará en problemas como la caspa (si quieres saber más sobre esta consecuencia, lee el post Todo lo que debes saber sobre la caspa), la grasa, picor e irritación y la caída del pelo.
A continuación, te mostramos 5 sencillos pasos que seguir en tu rutina diaria de cuidado de cabello:
1. La limpieza y la hidratación son fundamentales
A nivel general, se aconseja exfoliar cada semana o 15 días, usar un champú limpiador y una mascarilla hidratante. De esta forma, la exfoliación permite eliminar las células muertas del cuero cabelludo y activar la circulación que, junto con la hidratación profunda del champú y la mascarilla, favorece el crecimiento capilar. Aun así, cada pelo es un mundo, por lo que es importante usar productos que se adecuen a tu cabello específicamente: si te lavas el pelo todos los días, por ejemplo, enjuaga solamente una vez; si tienes el pelo graso y fino, es aconsejable no usar mascarilla, etc. Lo importante es mantener el cabello limpio e hidratado con los productos que mejor se adapten a tu pelo.
2. Masajea el cuero cabelludo
Para ello, utiliza siempre los dedos, nunca las uñas. Aunque pueda parecer placentero y necesario frente a la irritación del cabello, es mejor usar las yemas de los dedos. Haz pequeños círculos en un recorrido ascendente desde el cuello hasta la frente. Este masaje activará la circulación sanguínea y estimulará los folículos pilosos que se encuentran en el interior del cuero cabelludo. Así, el producto entrará mejor en ellos y el pelo crecerá más y mejor.
3. El truco final: agua fría y peine
Recuerda hacer el aclarado con agua fría. Aunque pueda resultar molesto es un gesto sencillo que tu pelo agradecerá enormemente: activa la circulación y se verá mucho más brillante. Además, cuando lo cepilles usa un peine de madera o de carey, estos materiales son mucho menos dañinos para el pelo ya que lo rompen mucho menos que otros.
4. No usar mucho producto
Más no es mejor. Echarse dos kilos de champú o de mascarilla no significa que tu pelo va a dejar de estar seco o graso, ni que todos tus problemas capilares desaparecerán. Hay que dedicarle tiempo y usar la medida justa de producto, pues si no, se puede asfixiar el folículo piloso e impedir una oxigenación adecuado. Por otro lado, ten en cuenta que no es malo lavarse el pelo a diario, simplemente reduce un poco más las cantidades y enjuágate solamente una vez con champú.
5. Al natural, mejor
Intenta usar productos naturales. La miel ayuda en casos de dermatitis ya que es hidratante y antioxidante. La cebolla, por su parte, previene de la caspa y de la grasa, así como de la caída del cabello. Las propiedades del aloe vera también son beneficiosas para la sequedad del cuero cabelludo. Otra alternativa es usar productos industriales con altos porcentajes de bases naturales.
¿Qué más puedes hacer para cuidar tu cuero cabelludo?
Además de cuidar tu pelo con una rutina específica cada vez que lo lavas, analizar cada una de las causas que provocan un cuero cabelludo sensible es muy importante para no acabar con un pelo enfermo.
Por eso, te damos otros consejos que te ayudarán a cuidar tu cuero cabelludo:
- Someter al cabello a temperaturas elevadas como las del secador o las planchas hace que se queme y se rompa. Aleja el secador 10 cm para evitar esa sobreexposición al calor y usa protectores términos previamente.
- Tintes, espumas, geles… y otros productos para el pelo pueden afectar a la salud del mismo al ir dejando residuos y no dejar que respire. Hay que evitar su uso abusivo.
- El estrés afecta directamente a la caída del cabello y a la salud del mismo. El estrés es la enfermedad del siglo XXI y reducir su impacto ayuda a mejorar no solo a tu calidad de vida, sino también a tu salud.
- El uso de sombreros o gorros en exceso puede asfixiar el cuero cabelludo, sobre todo si el pelo está sucio, la grasa impide que el oxígeno penetre adecuadamente.
- Hacerse coletas mucho tiempo o muy fuertes también es malo. La tensión constante en la raíz hace que el cabello se debilite, se caiga y no crezca igual.
- La alimentación también afecta al cabello. Por ejemplo, cabellos grasos muchas veces van relacionados con una dieta alta en grasas, o falta de vitaminas se refleja en un cabello más flojo y con menos brillo. Por ello, es fundamental seguir una buena alimentación rica en fruta y verduras.
