La Organización Mundial de la Salud define la COVID-19 como la enfermedad infecciosa causada por el coronavirus que se ha descubierto más recientemente. El brote de esta enfermedad ha sido declarado una emergencia de salud pública de interés internacional ya que, en casos severos, puede causar infección en los pulmones (neumonía), insuficiencia renal e incluso la muerte.
Aunque las personas con diabetes no tienen más riesgo de contraer la COVID-19 que la población general, lo cierto es que puede pueden ser más vulnerables a los efectos graves del virus, desarrollando síntomas y complicaciones más graves, tal como explica la Federación Internacional de Diabetes.
Un estudio publicado en The Lancet y realizado a 191 pacientes de Wuhan, informaba de que, de los pacientes que fallecieron, el 48% tenían una patología previa: siendo la más común la hipertensión (30%), seguida de la diabetes (19%) y la enfermedad coronaria (8%).
También la Asociación Americana de Diabetes afirma que en China las personas con diabetes tuvieron tasas más altas de complicaciones graves. No obstante, recuerda que si la diabetes está bien controlada, el riesgo de desarrollar una enfermedad grave es el mismo que el de la población general.
¿Cuáles son los síntomas de la COVID-19?
Los síntomas más comunes de la COVID-19 son fiebre, cansancio y tos seca. Algunos pacientes pueden presentar dolores, congestión nasal, rinorrea, dolor de garganta o diarrea, pero estos síntomas suelen ser leves y aparecen de forma gradual.
Además, conviene recordar que los síntomas generalmente se desarrollan de 3 a 7 días tras la exposición al virus, aunque en algunos casos han tardado hasta 14 días en aparecer. De hecho, algunas personas se infectan pero no desarrollan ningún síntoma y no se encuentran mal.
Alrededor del 80% de las personas se recuperan sin necesidad de ningún tratamiento especial. Solo 1 de cada 6 personas que contraen la COVID-19 desarrolla una enfermedad grave y tiene dificultad para respirar.
No obstante, cabe tener en cuenta que las personas mayores y las que padecen afecciones médicas subyacentes, como hipertensión arterial, problemas cardiacos o diabetes, tienen más probabilidades de desarrollar una enfermedad grave.
¿Qué puedo hacer si tengo diabetes?
La Sociedad Española de Diabetes recomienda a las personas con diabetes mantener el mejor control metabólico posible, para estar preparadas ante un posible episodio infeccioso, sea por este virus o por cualquier otro.
Además, es importante tomar precauciones para evitar el virus si es posible. Las recomendaciones que se emiten ampliamente al público en general son doblemente importantes para las personas con diabetes y para cualquier persona que tenga contacto cercano con ellas. Estas son las que ha publicado de la Federación Internacional de Diabetes:
- Lávate bien las manos y regularmente.
- Evita tocarte la cara antes de lavarte y secarte las manos.
- Limpia y desinfecta cualquier objeto y superficie que se toque con frecuencia.
- No compartas alimentos, vasos, toallas, herramientas, etc.
- Cuando tosas o estornudes, cúbrete la boca y la nariz con un pañuelo de papel o usa la curva de tu brazo si no tienes un pañuelo a mano (desecha el pañuelo después de usarlo).
- Trata de evitar el contacto con cualquier persona que presente síntomas de enfermedades respiratorias, como tos.
- Presta especial atención al control de tu glucosa.
- Si presentas síntomas similares a los de la gripe (temperatura elevada, tos, dificultad para respirar), es importante consultar a un profesional de la salud. Si estás tosiendo flema, esto puede indicar una infección, por lo que debes buscar asistencia médica y tratamiento de inmediato.
- Cualquier infección elevará tus niveles de glucosa y aumentará tu necesidad de líquidos, así que asegúrate de poder acceder a un suministro suficiente de agua.
- Asegúrate, también, de tener un buen suministro de los medicamentos para la diabetes que necesitas.
- Asegúrate de poder corregir la situación si tu glucosa en sangre cae repentinamente.
- Si vives solo, asegúrate de que alguien en quien puedas confiar sepa que tienes diabetes, ya que puedes necesitar asistencia.