Una dieta sana y equilibrada es fundamental para mantener un estado de salud óptimo. Y en ella, el pescado juega un papel vital pues es rico en omega 3 y contiene vitaminas y nutrientes de alta calidad. Además, en el caso de los niños es especialmente importante ya que contribuye a su mejor desarrollo.
Sin embargo, es frecuente que pasemos por alto que el pescado contiene mercurio. Y, aunque no es algo muy preocupante, debemos vigilar qué cantidad de este componente ingerimos y procurar reducirla al máximo.
¿Qué es el mercurio?
Se trata de un metal cuya presencia en el medio ambiente ha aumentado debido a las actividades como la agricultura o la combustión de carbón. Cuando se encuentra en el agua, cambia su forma convirtiéndose en metilmercurio, que es absorbido por los peces y, cuando una persona los come, puede absorber a su vez esta variante del mercurio.
¿Quién debe evitar especialmente el mercurio en el pescado?
Por lo general el pescado es un alimento muy saludable y, en la mayoría de las personas, el nivel de mercurio que haya podido absorber no constituye ningún peligro. Sin embargo, comer grandes cantidades de pescado con altos niveles de mercurio puede dañar el cerebro y sistema nervioso de los niños, o incluso del feto en caso de que lo consuman mujeres embarazadas.
Por eso, la Administración de Medicamentos y Alimentos de EEUU (FDA, por sus siglas en inglés) elaboró un breve listado de personas que deben evitar comer pescados con alto contenido de mercurio:
- Mujeres embarazadas.
- Mujeres que están buscando quedar embarazadas.
- Madres en periodo de lactancia.
- Niños pequeños.
Formas de reducir el mercurio en el pescado
Para poder compaginar los beneficios del pescado en nuestra dieta con la reducción del mercurio en aquellas especies que traen niveles elevados, es necesario aprender a reducir sus efectos tóxicos.
El consumo de frutas, verduras y fibra, ayuda a reducir sus efectos ya que contribuyen a que lo expulsemos de nuestro organismo mediante la orina o las heces. Además, la ingesta de pescado junto a determinados alimentos ricos en fitoquímicos como el té verde, el té negro y la proteína de soja, también ayuda a reducir el mercurio.
También es importante conocer qué pescados suelen contener más niveles de mercurio y controlar su consumo. El pez espada, el atún y el emperador son los que más metilmercurio absorben.