Un análisis epidemiológico realizado en 652 ciudades de todo el mundo, 45 de ellas españolas, ha revelado que la exposición a la contaminación del aire urbano aumenta el riesgo de mortalidad a corto plazo.
Hasta la fecha, este estudio supone la evaluación sobre los efectos de la contaminación en el aire más grande que se haya realizado. Los investigadores que han participado en él han reunido datos de series temporales en todas las ciudades donde han desarrollado su trabajo, en un periodo que comprende desde 1986 hasta 2015.
Un aumento de 10 microgramos/m3 en partículas inhalables (PM10) se asocia con un aumento en la mortalidad de 0,44% y 0,68%.
“Se ha encontrado que, en promedio, un aumento de 10 microgramos/m3 en partículas inhalables (PM10) –capaces de penetrar hasta los pulmones- y finas (PM2.5) -generadas por la combustión y que pueden penetrar hasta el torrente sanguíneo- se asocia con un aumento en la mortalidad de 0,44% y 0,68%”, explica el investigador Aurelio Tobías.
Uno de los autores principales de este trabajo, el doctor Antonio Gasparrini, afirma: “Si bien el aumento porcentual de la mortalidad parece pequeño, este riesgo puede conducir a un exceso significativo en el número de muertes, dada la exposición generalizada y las grandes poblaciones que viven en zonas urbanas”. Y añade, “la ausencia de un umbral discernible significa que es probable que ocurra un aumento sustancial de la mortalidad incluso con baja exposición a partículas. Estos resultados deben tenerse en cuenta al evaluar los beneficios potenciales de las intervenciones para reducir la contaminación del aire urbano, y al revisar valores umbrales existentes para la salud humana”.
Idéntica metodología para todas las ciudades.
Gracias a la aplicación de un método de análisis unificado para todas las ciudades, el estudio permite hacer una comparación crítica del riesgo entre poblaciones de distintas regiones. Aunque se identificaron algunas diferencias, los investigadores fueron capaces de establecer una asociación positiva en todas ellas, independientemente de los niveles de contaminación y el entorno socioeconómico de cada una.
En relación a esto último, el profesor Haidong Kan de la Universidad de Fudan, el otro autor principal del estudio, señala: “La consistencia del riesgo estimado en múltiples países y poblaciones agrega evidencia sobre el posible vínculo causal entre la exposición a la contaminación del aire y el aumento a corto plazo de la mortalidad”.