Donar sangre tiene gran cantidad de beneficios. El principal es el de sentirse bien con uno mismo después de ayudar a otras personas. Hay que recordar que muchas personas necesitan sangre nueva cada día, debido a distintas patologías que puedan sufrir.
Pero más allá de la ayuda a otras personas, este acto también ayuda a tu propia sangre, ya que aporta grandes beneficios.
Aquí te mostramos los siguientes beneficios que aporta:
Equilibrio de los niveles de hierro
El hierro se usa por nuestro organismo, como parte de la hemoglobina, la cual se encarga de transportar el oxígeno a los tejidos. Y, aunque los niveles bajos de este elemento pueden producir anemia, se ha demostrado que es más peligroso el exceso de hierro.
Con cada unidad de sangre que donamos, perdemos un cuarto de gramo de hierro. Por lo tanto, cada vez que donamos sangre, disminuimos el nivel de hierro sobrante de nuestro organismo, beneficiando así a nuestra sangre.
Por ejemplo, las mujeres premenopáusicas, que realizan donación de sangre, tienen 88% menos de probabilidades de sufrir un ataque al corazón.
Mejora la circulación de la sangre
El sedentarismo y la alimentación alta en grasas y azúcares, hace que la sangre se hipercoagule, se haga más espesa y que tenga una lenta circulación. Lo que aumenta el riesgo de padecer un coágulo sanguíneo o un derrame cerebral, contribuyendo además a la inflamación, ya que el oxígeno no llega bien a los tejidos.
Donar sangre, puede hacer que la sangre circule correctamente y no se produzcan tantos daños en los vasos sanguíneos, consiguiendo así menos bloqueos arteriales.
Protege nuestro corazón
Al no realizar donaciones, la sangre no se acaba de renovar, por lo que el hierro afecta a las paredes arteriales y demás, afectándolas. En cambio, si hacemos donaciones, la sangre se renueva y renueva los niveles de hierro de la sangre.
Previene el daño hepático
EL hígado es el encargado de mejorar el metabolismo, en relación a vitaminas, minerales, proteínas y carbohidratos. Este órgano convierte la glucosa en glucógeno y en el almacenamiento de este, además de vitaminas y minerales. Además, ayuda también en la purificación de la sangre y su desintoxicación, sintetizando las proteínas plasmáticas y coagulantes.
Con la donación regular, prevenimos el daño hepático causado por gran cantidad de hierro en el cuerpo. Los alimentos ricos hierro, son beneficiosos. Lo perjudicial es tener un exceso de hierro, el cual suele ser absorbido en el hígado y en el páncreas. Esto puede hacer que aumente el riesgo de cirrosis, insuficiencia hepática, daño en el páncreas o anomalías del corazón.
Recomendaciones para donar sangre
En caso de querer donar sangre, ya sea a un conocido o como un acto voluntario, debes tener en cuenta estos puntos:
- Debes tener 18 años, y no superar la edad de los 65. Además, debes medir al menos 150 centímetros y pesar mínimo 50 Kg,
- No debes de haber estado enfermo o haber ingerido cualquier medicamento durante los últimos 3 días.
- No haberse realizado tatuajes o pircings en el último año.
- No sufrir adicción por las drogas.
- No someterse a cirugías en los últimos 3 meses.
- No estar embarazada, amamantando o en período de menstruación.
