El 73% de los españoles con obesidad consideran que tienen un peso normal o solo algo de sobrepeso, frente a sólo el 24% que reconoce tener obesidad y el 2% tener obesidad extrema. Este es uno de los datos que se desprende del estudio internacional ACTION IO (acrónimo en inglés de Concienciación, Cuidado y Tratamiento en el Manejo de la Obesidad, una Observación Internacional).
El mismo, es el mayor realizado hasta la fecha para investigar qué obstáculos dificultan el abordaje de la obesidad desde la perspectiva de las personas que la padecen y de sus profesionales médicos.
“Este estudio nos corrobora evidencias que ya veníamos observando desde las consultas, aunque no de forma tan alarmante, y nos descubre discrepancias importantes entre médicos y personas con obesidad sobre su percepción de la enfermedad”, señala el doctor Javier Salvador, coordinador del estudio en España y profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Navarra.
Percepción de la obesidad como una enfermedad crónica
Todas las personas encuestadas tenían un índice de masa corporal (IMC) declarado por encima de 30, lo que se considera hoy en día como obesidad. Y a pesar de que el 83% tenía una o más enfermedades asociadas (hipertensión, diabetes, apnea del sueño, etc.), el 41% del total no lo considera una enfermedad crónica.
Sin embargo, la doctora Nuria Vilarrasa, autora del estudio y especialista en endocrinología y nutrición del Hospital Universitario de Bellvitge (Barcelona), recuerda que la Organización Mundial de la Salud y todas las sociedades científicas involucradas con su tratamiento la reconocen como tal. “La obesidad es uno de los problemas de salud más complejos a los que se enfrenta la sociedad actualmente, pero esto no se refleja en la práctica clínica si la comparamos con otras enfermedades crónicas”, comenta.
Por ello, afirma el doctor Francisco Pajuelo, director médico de Novo Nordisk, “el estudio ACTION IO subraya que es necesario abordar un gran número de áreas para mejorar el cuidado de la obesidad”.
Conversación entre médicos y pacientes
De acuerdo con la investigación, uno de los principales obstáculos para el abordaje de la enfermedad es la falta de conversación en consulta sobre cómo gestionar el peso. Más de la mitad de los encuestados (67%) conversaron en algún momento a lo largo de los últimos cinco años con su médico acerca del peso. No obstante, para los expertos es preocupante que aun haya un 33% que no lo hace. Y más, si cabe, si se tiene en cuenta que, de los que conversaron, recibieron un diagnóstico de obesidad el 66% y de estos sólo el 36% salieron de la consulta con una cita para revisión.
Hay también discrepancias entre unos y otros sobre los motivos por los cuales no se produce esta conversación. La razón dada por las personas con obesidad para no hablar al respecto, en un 42% de los casos, fue la convicción de que la responsabilidad del tratamiento y del cuidado es exclusivamente suya.
En cambio, las principales razones que esgrimen los profesionales sanitarios son los tiempos limitados en la consulta (62%) o la falta de interés y motivación de los pacientes para perder peso (75%). Sin embargo, sólo un 22% de las personas con obesidad aluden a la falta de motivación como una de las razones para no conversar con su médico.
Como otro aspecto de interés, el doctor Miguel Ángel Rubio, autor del estudio y especialista en endocrinología y nutrición del Hospital Clínico San Carlos, subraya que, “el tiempo medio entre el momento que empieza la preocupación por parte del paciente respecto al peso y el inicio de conversaciones con el médico es de 6 años. Un tiempo muy elevado si se tiene en cuenta que pueden ir desarrollándose muchas comorbilidades que compliquen seriamente el estado de salud de las personas”.
En definitiva, todos los expertos insisten en que, “es fundamental que comencemos a tratar la obesidad como lo haríamos con cualquier otra enfermedad crónica: diagnosticándola, hablando sobre ella y ofreciendo un seguimiento continuado con unos objetivos específicos”.