Un estudio internacional publicado en la revista Science ha comprobado que el distanciamiento social afecta a la salud y al riesgo de mortalidad. Tras revisar la literatura científica sobre estos factores sociales en el bienestar de otros mamíferos, como los primates no humanos, ha determinado que las relaciones sociales pueden alterar la fisiología, el riesgo de enfermedad y la esperanza de vida.
El estudio confirma así que el aislamiento social está asociado con un mayor riesgo de mortalidad, como ya se había demostrado en estudios en humanos. “Sabíamos que uno de los indicadores más fuertes de todas las causas de mortalidad, incluso por encima de beber y fumar, es estar socialmente aislado”, corrobora Noah Snyder-Mackler, autor principal del trabajo e investigador en el Centro de Evolución y Medicina de la Universidad del Estado de Arizona de EE UU.
El estudio ha demostrado ahora que este vínculo entre aislamiento social y mortalidad se encuentra en todo el reino animal de manera muy similar. “Los animales que están menos conectados socialmente tienden a vivir vidas más cortas en todos los ámbitos”, apunta el científico estadounidense.
¿Cuáles son los motivos?
“Una hipótesis es que estar conectado socialmente significa tener un entorno más predecible y menos estresante. Y sabemos que el estrés puede afectar negativamente al sistema inmunitario”, recalca Snyder-Mackler.
“Los humanos somos animales sociales, por lo que para comprender cómo nuestros entornos sociales afectan a nuestra salud, podemos mirar a otros animales con los que compartimos una historia evolutiva”, explica el investigador.
¿Por qué es mejor estudiarlo en animales?
Los investigadores decidieron centrarse en los estudios sobre animales porque la sociedad humana actual ha introducido otros factores sociales que influyen en la salud, como son el acceso a la atención médica y el cuidado de la alimentación. “Estas variables en realidad dificultan la identificación de si la adversidad social causa mala salud y de qué manera”, explica el científico.
¿Cómo nos ha afectado el distanciamiento por la crisis del coronavirus?
Estos resultados coinciden con las actuales medidas de distanciamiento social para evitar la propagación de contagios por SARS-CoV-2. Aunque no tenemos datos para afirmar que el distanciamiento social vaya a afectar drásticamente la salud y la supervivencia, ciertamente está afectando a la salud mental.
Sin embargo, los investigadores consideran que, en este caso, los efectos negativos de la cuarentena serán superados por el impacto positivo que tiene la disminución de las infecciones.
No obstante, el equipo recomienda mantenerse conectado: “Aunque no se pueda estar físicamente con amigos y familiares, se puede hacer virtualmente”. Hacer videollamadas o enviar mensajes a familiares y amigos es necesario para evitar los efectos negativos del aislamiento.
“Estas conexiones están profundamente arraigadas en nuestra historia evolutiva y pueden protegernos de las consecuencias negativas para la salud provocadas por tiempos inciertos”, concluye Snyder-Mackler.