Estrés es la palabra que resume la falta de tiempo combinado con un exceso de ambiciones, que supone: ansiedad, nerviosismo o desconcierto. Es la respuesta natural del cuerpo a aquello que nos causa miedo, es, en definitiva, un proceso natural clave para la supervivencia pero que vivido de manera continua y con una intensidad excesiva tiene efectos nefastos sobre la salud.
El estrés crónico es una de las enfermedades de nuestro siglo, el mundo cambia de forma tan brusca que no somos capaces de adaptarnos y esto trae como consecuencia ciertos hábitos que disminuyen nuestra calidad de vida.
¿Cuáles son estos hábitos?
1. Tomar demasiado café.
El café es una de las bebidas más consumidas en el mundo por su alto poder estimulante, sin embargo, tiene efectos directos en nuestro sistema nervioso central y su consumo excesivo puede provocar insomnio, nerviosismo, aumento del ritmo cardíaco o ansiedad.
2. Comer alimentos procesados
Se dice que un alimento es procesado cuando ha pasado por un proceso que modifica su apariencia y sus nutrientes. Son también procesados aquellos alimentos en cuya composición hay más de dos ingredientes.
Los alimentos con exceso de azúcares y grasas no contienen los nutrientes necesarios, por lo que el cuerpo demanda más comida en un plazo de tiempo más reducido; las digestiones son más pesadas e incluso pueden provocar insomnio si son consumidos antes de dormir.
3. Irse a la cama muy tarde
No llevar un ritmo de sueño adecuado o irse a dormir excesivamente tarde puede acarrear una alteración de los ciclos del sueño haciéndonos propensos al insomnio. Sin el descanso adecuado, el día se nos hará más largo, reduciendo nuestra eficiencia y productividad e incluso acarreándonos problemas de salud.
4. Sobrecarga de actividad intelectual
En los puestos de trabajo actuales se ha incrementado la actividad mental en detrimento de la física. Cuando el trabajo exige constantemente un alto grado de atención puede aparecer una sobrecarga que influye en el bienestar psicológico y personal del individuo, provocando dolor de cabeza y aumento de los niveles de cortisol.
¿Qué efectos puede causar el estrés?
El estrés no solo afecta a tu mente, puede afectar además a tus pensamientos y emociones.
Los síntomas físicos más comunes son: el dolor de cabeza, la fatiga, el dolor de estómago y los problemas de sueño. Además, a nivel anímico, puede desembocar en: ansiedad, agitación irritabilidad e incluso tristeza.
¿Cómo reducir el estrés?
- Planifica de forma realista tus actividades: tanto las de trabajo como las de ocio, controla tu tiempo y busca la manera más eficiente de invertirlo.
- Dedícate tiempo: monta en bicicleta, sal a correr a nadar o escucha música. Invertir tiempo en ti puede ayudarte a ver las cosas con más claridad y a eliminar las emociones negativas.
- Intenta sustituir los pensamientos negativos por otra manera de entender la situación, acepta nuevos puntos de vista.
- Controla los alimentos con excitantes como el café, los refrescos o el chocolate: comer de forma saludable te ayudará a tener más energía.
- Acepta que hay cosas que no puedes cambiar: no puedes evitar que haya atasco por las mañanas pero puedes cambiar la forma en la que te enfrentas a él, por ejemplo escuchando un programa de radio que te ayude a evadirte o a tu cantante favorito.
- No reduzcas tus horas de sueño. Descansar lo suficiente durante la noche te ayudara a pensar con más claridad y a tener más energía para enfrentarte a cualquier situación adversa que pueda surgir.
No te equivoques, el contrario del estrés no es el descanso, sino la relajación, hay quien práctica ejercicio varias veces por semana y hay quien prefiere la meditación, cualquier opción es válida, busca la que más se adapte a tus necesidades.