Un reciente estudio ha descubierto que las propiedades luminiscentes que poseen los cristales líquidos podrían utilizarse para diseñar materiales inteligentes con diferentes aplicaciones para la sociedad.
El equipo de investigadores, de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y la Universidade Nova de Lisboa (UNL) en Portugal, ha desarrollado compuestos de coordinación de platino (II) que presentan una naturaleza cristal líquido estable en amplios rangos de temperatura, llegando a alcanzar los 400ºC, y que de manera adicional exhiben un comportamiento luminiscente.
“Observamos que este comportamiento cambia drásticamente cuando el material es sometido a presión, fricción mecánica o a altas temperaturas”, apunta Cristián Cuerva, investigador del departamento de Química Inorgánica de la UNL.
Cuando las moléculas se encuentran aisladas, emiten una luz verde. Sin embargo, al aumentar la temperatura o al aplicar presión, las moléculas se van aproximando entre sí hasta que los centros de platino de cada una de ellas se encuentran lo suficientemente cerca como para que existan transferencias de carga entre ellas, “lo que origina una intensa emisión fosforescente de color naranja”, explica el investigador.
Posibles aplicaciones
De este modo, los expertos señalan cómo estas sustancias moleculares podrían utilizarse en el sector de la alimentación para fabricar sensores visuales que sirvan de alerta ante un incremento brusco de temperaturas y detectar así rupturas de la cadena de frío en el transporte de alimentos.
“También podrían ser útiles como sensores de presión en el área industrial para evitar la rotura de materiales sometidos a esfuerzos constantes, en el campo de la seguridad para cifrar información, o en el ámbito sanitario como marcadores celulares”, añade Cuerva.
Cristales líquidos
Los cristales líquidos, que en su día se utilizaron para fabricar las conocidas pantallas LCD, podrían tener otras numerosas aplicaciones en los campos de la sanidad, la alimentación, la industria o la ciberseguridad si se aprovecha su comportamiento luminiscente.
“Aunque muchos entendidos consideran que, con los LCD, las aplicaciones de estos materiales ya han ‘tocado fondo’, nosotros demostramos que determinados cristales líquidos que contienen metales pueden ser también candidatos prometedores para desarrollar etiquetas inteligentes que respondan selectivamente a diferentes estímulos externos”, explica Cristián Cuerva, investigador del departamento de Química Inorgánica de la UNL.