El cáncer de páncreas es uno de los tumores más agresivos que puede sufrir el ser humano. El 80% de los pacientes no superar el año de vida y casi el 100% muere antes de cumplir los 5 años desde el diagnóstico.
El cáncer de páncreas pone sobre la mesa la necesidad de una mayor investigación para fomentar el diagnóstico precoz y poder combatir el tumor lo antes posible. El 3% de los cánceres diagnosticados son de páncreas. Además, este supone la tercera causa de muerte por enfermedad oncológica. Por ello, se pone de manifiesto la necesidad de conocer más acerca de esta patología.
¿En qué consiste el cáncer de páncreas?
El cáncer de páncreas es una enfermedad silenciosa porque en los comienzos no presenta síntomas que puedan ser percibidos. Hasta el momento, si no se presentan síntomas es muy difícil detectar el cáncer de páncreas. Sin embargo, ya se van realizando avances para conseguir este objetivo.
Cuando la persona padece síntomas, estos suelen comenzar como úlceras o pancreatitis. La piel se amarillea, incluidos los ojos, algo que es conocido como ictericia. La orina se vuelve más oscura y las heces cambian de color y consistencia por la obstrucción de los conductos biliares.
Por otro lado, se sufre dolor en la parte superior del abdomen y puede aparecer una inflamación dolorosa en las extremidades como consecuencia de la presencia de un coágulo. El ardor de estómago y las molestias gastrointestinales aparecen, junto con fiebre, pérdida de peso, escalofríos y náuseas entre otros.
Si experimentas algún cambio en tu interior, lo primero que debes hacer es contactar con el especialista para llevar a cabo una evaluación y descartar el cáncer de páncreas. En el caso de que seas diagnosticado, el alivio de los síntomas será una prioridad, así como el inicio del tratamiento. Se inician cuidados paliativos y la quimioterapia, aunque en algún caso se vuelve necesaria la intervención quirúrgica.
Avances en el diagnóstico precoz
Aunque es uno de los tumores más mortíferos, la investigación ha permitido que se identifique un nuevo biomarcador para el diagnóstico precoz del cáncer de páncreas. Científicos del CSIC han relacionado la presencia de una proteína con la detección temprana de tumores pancreáticos.
Esto, permitiría diagnosticar el cáncer a través de una analítica de sangre. En este análisis se detectaría una proteína denominada tirosina-quinasa AXL. Hasta el momento no existía ningún biomarcador para el diagnóstico temprano del cáncer de páncreas.
Esta proteína se encuentra en la superficie de las células y suele estar ausente en células normales. Cuando se padece cáncer de páncreas es cuando aparece esta proteína, que se convierte en un marcador para la detección precoz tumores en el páncreas.