El Síndrome de Fatiga Crónica es un trastorno que se caracteriza porque quien la padece siente un cansancio extremo constante. Normalmente, no se puede atribuir a una afección subyacente y suele empeorar si se realiza un esfuerzo físico o mental. Pero, sobre todo, su mayor particularidad reside en que no mejora con el descanso.
También conocido como encefalitis miálgica, este trastorno suele manifestarse a través de tres síntomas. Son el sueño no reparador, mareos al levantarse y dificultades para concentrarse o con la memoria, aunque puede haber más. Por ejemplo, dolores musculares, de garganta o de cabeza sin explicación o agrandamiento de los ganglios linfáticos.
Causas del Síndrome de Fatiga Crónica
Es importante recordar que todavía no existe una causa específica que provoque el Síndrome de Fatiga Crónica. Sin embargo, diversos estudios apuntan a que ciertas personas pueden nacer con predisposición a este fenómeno. Se cree que algunos factores que pueden provocar su aparición son:
- Infecciones víricas: aunque no existen relaciones concluyentes, algunas personas desarrollan Síndrome de Fatiga Crónica tras una infección viral. Los virus de Epstein-Barr y el del herpes humano 6 son los principales sospechosos.
- Desequilibrio hormonal: muchas personas con este trastorno presentan niveles anormales de ciertas hormonas en sangre. Sin embargo, no se ha podido comprobar la importancia de este factor.
- Leve deterioro del sistema inmunitario: los pacientes con encefalitis miálgica suelen presentar un sistema inmunitario algo afectado. Lo que no se conoce es la importancia de este desgaste como para causar tal nivel de cansancio.
- Traumas: ya sean físicos o emocionales, muchos pacientes se sometieron a cirugías, estrés u otras lesiones antes de desarrollar este fenómeno.
El tratamiento para el Síndrome de Fatiga Crónica, independientemente de su causa, suele ser paliativo. Por ejemplo, se emplean analgésicos en caso de dolor. En definitiva, puede decirse que no tiene cura.
Encefalitis miálgica asociada a la Covid-19
El Síndrome de Fatiga Crónica es un gran desconocido y, por tanto, puede ser difícil de detectar y diagnosticar. Sin embargo, se está dando un pequeño incremento de casos de este trastorno que se asocian a haber padecido Covid-19. Es decir, el SARS-CoV-2 se uniría al de Epstein-Barr y el del herpes humano 6 como posibles causantes de encefalitis miálgica.
En España, la Sociedad Española del Dolor (SED) ha estudiado esta alteración. Algunos análisis han concluido que hasta el 27% de los pacientes pueden desarrollar fatiga crónica tras la infección. Los síntomas que manifiestan suelen ser una peor calidad del sueño, síntomas depresivos, disnea y poca memoria o concentración.
Además, es de importancia señalar que el Síndrome de Fatiga Crónica afecta más a las mujeres. En concreto, el que se desarrolla tras padecer Covid-19, afectó un 22% más a las mujeres que a los hombres.