El tenista español Rafa Nadal acaba de ganar su 22º Grand Slam y 14º Roland Garros. Sin embargo, no ha sido una victoria sencilla: Nadal padece el síndrome de Müller-Weiss, una enfermedad degenerativa en los huesos del pie.
Concretamente, se trata de una displasia (deformidad ósea) del escafoides tarsiano que se produce en la infancia, pero no se manifiesta hasta la edad adulta. El escafoides tarsiano es uno de los huesos que forman parte del arco del pie. El problema es que se articula en los tres primeros dedos del pie, empezando por el gordo.
Síntomas, etapas y diagnóstico del síndrome de Müller-Weiss
El único signo que avisa de que este trastorno se está manifestando es el dolor intenso en el dorso del pie. En general, este tipo de situaciones ocasiona que el paciente modifique su forma de andar, algo que, si no se trata, puede desembocar en otros trastornos. Además, puede ir acompañado de dolor en las rodillas que, con el tiempo, tiene probabilidades de evolucionar a artrosis.
Esto se debe a que se trata de un trastorno que cursa en 5 etapas. La primera de ellas es silenciosa. En la segunda, el paciente comienza a notar el dolor, que irá aumentando progresivamente si no se trata. Finalmente, la quinta etapa es la de artrosis.
Consecuentemente, el síndrome de Müller-Weiss no es una enfermedad fácil de diagnosticar y que se puede confundir con otras afecciones más comunes. Es por este motivo que es necesario acudir a un médico especialista en Podología. Este realizará las pruebas pertinentes, que incluyen una radiografía y exploración clínica.
Las 2 líneas de tratamiento disponibles
Es importante destacar que este trastorno es degenerativo y, de momento, no existe un tratamiento que lo cure al 100%. Sin embargo, existen dos líneas terapéuticas para abordarlo:
- Conservadora: consiste en emplear plantillas personalizadas que ayudan a descargar los puntos de presión en el pie y corrigen su biomecánica. Iría acompañado de fisioterapia, infiltraciones específicas y el uso de antiinflamatorios.
- Quirúrgica: si el grado de deformidad ósea es muy alto, existen opciones quirúrgicas para corregirla.
También existen otros tratamientos, como la magnetoterapia, que ayudan a aliviar los síntomas asociados al síndrome de Müller-Weiss.