La ictericia se caracteriza por la aparición de un color amarillento en la piel y también en la zona de las mucosas. Como norma general, no se trata de una patología grave, aunque puede empezar a producir determinados fallos hepáticos en los pacientes y convertirse en un condicionante serio cuando aparece en los bebés.
A continuación, analizamos qué es la ictericia, cuáles son sus causas, síntomas y tratamientos.
¿Qué es la ictericia?
La ictericia es una enfermedad que destaca por la apariencia amarillenta de la piel y de las mucosas a causa de una acumulación anormal de pigmento biliar. Habitualmente, este color amarillo aparece en primer lugar en las mucosas y los ojos, para después extenderse por el resto del cuerpo.
Cuando la ictericia aparece en los pacientes adultos, se puede tratar con buen pronóstico y, como consecuencia, puede causar determinados fallos hepáticos. No obstante, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado de que la aparición de enfermedades como la ictericia o las infecciones bacterianas en los recién nacidos está requiriendo un importante tratamiento en casi 30 millones de pacientes neonatos alrededor del mundo y poniendo en riesgo sus vidas.
Causas de la aparición de la ictericia
La aparición de este problema se debe a un exceso de bilirrubina que se detecta al apreciar que su concentración plasmática está por encima de 2 mg/dl.
Las causas más frecuentes de la hiperbilirrubinemia son las siguientes:
- Hepatitis: esta enfermedad hepática se ocasiona generalmente por la aparición de un virus o derivada de un trastorno autoinmunitario. Afecta al hígado, así como a su tratamiento de la bilirrubina.
- Enfermedad hepática alcohólica: esta patología se da cuando se consume alcohol en cantidades relevantes por un periodo de tiempo prolongado. Causa lesiones en el hígado.
- Obstrucción por un tumor o cálculo biliar: aparece causada por un bloqueo de las vías biliares, lo que produce un exceso de bilirrubina en la sangre.
- Reacción tóxica a un fármaco: a raíz de una mala reacción a un fármaco o a determinados medicamentos naturales.
La ictericia se puede deber en casos raros a otro tipo de problemas como las enfermedades hereditarias, entre las cuales destacan el síndrome de Gilbert o el síndrome de Dubin-Johnson. El diagnóstico se lleva a cabo mediante diferentes pruebas médicas, análisis de sangre y exámenes clínicos.
Síntomas para reconocer esta enfermedad
Los principales síntomas de la ictericia son los siguientes:
- Aparición de color amarillento de la piel.
- Episodios espontáneos de dolor abdominal y palpitaciones.
- Sensación de somnolencia, estados de confusión o agitación.
- Vómitos con sangre.
- Heces con sangre.
- Fiebre.
- Creación de hematomas con mayor facilidad y sangrado excesivo.
Ante la aparición de estos síntomas es importante acudir a un profesional médico para que realice un examen y efectúe un diagnóstico más concreto, con su consecuente tratamiento.
Tratamiento de la ictericia
La aparición de la ictericia en los pacientes adultos se interpreta como un síntoma de otros problemas de salud o enfermedades y no como una patología en sí misma. Por tanto, los especialistas tienden a buscar la causa principal de este problema y llevar a cabo el tratamiento para enfermedad principal.
Adicionalmente, se incluyen tratamientos para el picor de la piel con cortisona o intervenciones para acabar con la obstrucción de las vías biliares cuando se da el caso.
Si la hiperbilirrubinemia se da en niños recién nacidos, se tiende a interrumpir el proceso de la lactancia materna, se lleva a cabo la fototerapia y, en algunos casos, se realiza el intercambio sanguíneo para disminuir los niveles de bilirrubina en la sangre.