La lechuga es un vegetal cuya composición es en su mayoría agua. En
cuanto a calorías, este alimento tiene un aporte calórico muy bajo, por lo general por
cada 100 gramos de lechuga no hay más de 20 calorías. De ahí, que sea un alimento perfecto para mantener una dieta sana.
Además las lechugas son ricas en vitaminas y en minerales. De hecho estas incorporan las siguientes:
- Vitaminas A, C y E
- Sodio
- Magnesio
- Potasio
- Hierro
- Calcio
- Ácido fólico
Por otro lado, muchos expertos resaltan que la lechuga es un alimento que ayudar a mantener el azúcar en sangre regulado. Otro de los beneficios es que da facilidades para tener una buena salud del sueño.
Sin embargo, existen muchas variedades de lechuga. Las distintas variedades hacen que este alimento pueda cambiar tanto en color, como en sabor, como en textura. Hay más de 100 tipos de lechuga, pero aquí vamos a presentar los mejores tipos para añadir a tus ensaladas.
Lechuga escarola
La lechuga escarola tiene como sus principales características que es diurética y depurativa. El consumo de esta variedad se da mayormente en la época invernal. En cuanto al color y forma, presenta un color verde claro y sus hojas son dentadas.
Esta variedad se puede consumir por sí sola, pero si se junta con distintos frutos secos y fruta puede ser una muy buena opción para disfrutarla.
Lechuga Iceberg
Este tipo de lechuga tiene cierto parecido visual a una col. Esto se debe a que presenta una forma redonda y, además, sus hojas son blanquecinas y crujientes. Es una variedad que no tiene demasiado sabor, por ello, se utiliza, por lo general, como guarnición.
Lechuga Romana
Posiblemente la variedad de lechuga más conocida. Es el tipo de lechuga más producido y consumido del mundo. Presenta una forma alargada, con tallos, y con hojas crujientes. Su color es verde claro, pero este verde se oscurece al final de las hojas. El sabor de esta variedad tiende a ser amargo. Se utiliza como combinación de distintos platos de carne o pescado, pero también se le puede añadir fruta.
Rúcula
La rúcula es una variedad que se consume generalmente en el verano. Presenta hojas verdes y alargadas y tiene un sabor amargo. Es muy común comerla en pizzas, o con pasta, pero también combina muy bien con tomate o con pesto.
Canónigos
Los canónigos son una variedad de lechuga que presenta pequeñas hojas con un color oscuro y con forma redonda. Por lo general se consumen en épocas de frío, su producción se desarrolla mayormente en Francia. Su sabor tiende al ácido y se puede combinar con muchos alimentos.
Lechuga Batavia
Este tipo de lechuga tiene hojas onduladas en forma de roseta. Presenta un color verde oscuro y en el final de sus hojas puede presentar un color rojo o marrón. Su sabor es ácido y por ello, se tiende a combinar con otros tipos de lechuga. Es muy sabrosa, pero se estropea con mucha facilidad, por lo que es preferible consumirla con rapidez.
Lollo Roso
Esta variedad tiene su origen en Italia. Presenta hojas muy rizadas y un color rojo. Lo más habitual es utilizar este tipo de lechuga para realizar ensaladas junto a otras variedades. Muy recomendable utilizarla junto a alimentos como el aguacate, las fresas o la mozzarela.
Estas son algunas de las variedades con las que podrás realizar sabrosos platos con los que disfrutar en verano. Su aporte calórico es muy bajo, pero aporta muchos nutrientes muy positivos para mantener una dieta equilibrada.
