Se calcula que el 80% de los casos de ceguera son evitables o susceptibles de tratamiento. Eso sí, siempre y cuando el paciente reciba un diagnóstico temprano, y se le derive y trate adecuadamente lo antes posible. Todo ello es clave para evitar la progresión de las patologías que causan pérdida de visión irreversible. Sin embargo, para lograrlo es importante afrontar primero los retos de la Oftalmología en España.
Estas han sido algunas de las reflexiones clave de la mesa ‘Gestión basada en valor para la prevención de la ceguera irreversible’. El evento tuvo lugar en el marco del 23º Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Sanitaria organizado por SEDISA y ANDE, y ha contado con la colaboración de AbbVie.
La vista, el sentido más importante para el ser humano
“La vista es considerada el sentido más valioso que tenemos. Perderla traería importantes consecuencias en nuestro día a día. De ahí la importancia de la gestión basada en valor en Oftalmología como herramienta para garantizar una buena visión que repercuta en una vida activa, independiente y autónoma”. Son palabras de la doctora Dulce Ramírez Puerta, directora de Continuidad Asistencial en el Hospital Infanta Leonor y vicepresidenta primera de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA), encargada de moderar la mesa congresual.
En la mesa también han participado:
- El profesor Alfredo García Layana, presidente la Sociedad Española de Retina y Vítreo (SERV) y director del Departamento de Oftalmología en la Clínica Universidad de Navarra.
- El doctor José María Alonso Herreros, jefe del Servicio de Farmacia Hospitalaria en el Hospital Los Arcos Mar Menor. Miembro del grupo de trabajo de Farmacotecnia de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH).
- El doctor Francisco J. Morales Escobar, médico del Centro de Salud de Arucas y coordinador del grupo de trabajo OFT-ORL SEMERGEN.
- Delfina Balonga, fundadora y vicepresidenta de la Asociación de Glaucoma para Afectados y Familiares (AGAF).
Los expertos han destacado la importancia de prevenir las patologías que causan ceguera irreversible, por su sentido de urgencia y prioridad frente a otras como las cataratas, en las que la pérdida de visión sí se puede recuperar. Algunas de ellas son:
- El glaucoma, con una prevalencia del 3% en la población general.
- El EMD, que desarrolla el 11% de las personas con diabetes en España.
- La retinopatía diabética, con un 2,8% de prevalencia en nuestro país.
- La degeneración macular asociada a la edad (DMAE), que padece el 5,3% de los españoles mayores de 50 años.
Al mismo tiempo, los oftalmólogos están advirtiendo un incremento de las patologías oftalmológicas asociadas al envejecimiento. Por ejemplo, las proyecciones a nivel europeo muestran que los casos de glaucoma senil aumentarán de los 76 millones que había en 2020 a 95,4 millones para 2030. También se espera que la prevalencia de la diabetes en personas mayores de 65 años aumente considerablemente, lo que puede revertir en más casos de EMD en este colectivo.
La Oftalmología, una especialidad saturada en España
Según datos oficiales del Sistema Nacional de Salud (SNS), Oftalmología concentra uno de los mayores volúmenes de demanda asistencial. De hecho, es la segunda especialidad con mayor saturación de sus servicios. Tanto es así, que el 25% de los pacientes debe esperar más de 6 meses para obtener cita con el oftalmólogo.
Por estos motivos, durante la mesa se distinguieron los tres retos clave de la especialidad:
- La reorganización de los servicios para adecuar los recursos disponibles al nivel de demanda asistencial.
- La incorporación de las nuevas tecnologías, innovaciones tecnológicas y técnicas quirúrgicas a la práctica clínica habitual.
- Responder a las expectativas que tienen los pacientes del servicio. El perfil de paciente ha cambiado: ahora, aspira a recibir una excelente calidad asistencial y desea alargar sus años de vida útil de visión.
10 medidas para afrontar los retos de la Oftalmología en España
Los participantes identificaron 10 medidas de mejora que, a través de la gestión asistencial basada en valor, permitiría abordar los desafíos a los que se enfrentan los profesionales sanitarios españoles a la hora de evitar casos de ceguera irreversible. Es decir, afrontar los principales retos de la Oftalmología en España.
En primer lugar, se ha establecido que la educación y concienciación sobre las patologías oftalmológicas es una de las estrategias clave de prevención de la ceguera. Esto se debe a que permite reducir el tiempo que pasa entre el primer síntoma y la búsqueda de atención médica. Paralelamente, conlleva que los pacientes se impliquen más con su enfermedad, lo que redunda en una mayor adherencia al tratamiento.
Por otro lado, revisar y reasignar responsabilidades y tareas permitiría aliviar la carga asistencial de los oftalmólogos del SNS. Es el caso del personal de Enfermería, que actualmente carece de especialización. Sin embargo, con la formación adecuada, podría asistir en la realización de las pruebas diagnósticas. Por su parte, los oftalmólogos deben contar con la incorporación de los últimos avances terapéuticos y quirúrgicos. Esto permitiría la optimización en el rendimiento de los quirófanos y reduciría la lista de espera de los mismos.
También se ha apuntado a las campañas de cribado como mecanismo eficaz para detectar patologías como el glaucoma o el EMD antes de que se manifiesten los síntomas. Para ello, se podría dotar a Atención Primaria de la formación específica y los equipos diagnósticos adecuados. Además de apostar por la telemedicina y la semipresencialidad para el seguimiento de los pacientes.
En conjunto, las 10 medidas para afrontar los retos de la Oftalmología en España exigen rediseñar los circuitos del trabajo en consulta y a nivel de intervención quirúrgica. Especialmente, cuando se trata de patologías que generan mayor presión asistencial, ya sea por ser crónicas, por afectar a un mayor número de pacientes o por requerir de numerosas revisiones o administraciones de tratamiento. En este aspecto, se ha señalado al acto único –es decir, la revisión y la administración del tratamiento en el mismo día–y la optimización del rendimiento de los quirófanos, como una de las claves para lograrlo.
“Para hacer de estas medidas una realidad es fundamental el compromiso de todos los que estamos implicados en una atención oftalmológica de calidad”, ha indicado Dulce Ramírez. “La gestión del cambio en los servicios de Oftalmología es una realidad. Este proyecto nos da claves para seguir trabajando en la implementación de soluciones que mejoren la calidad asistencial de los pacientes”.