El sueño de una persona es muy importante, sin embargo, un buen descanso es imprescindible para los más jóvenes, sobre todo cuando son menores de un año. Para los adultos, una buena posición al dormir puede ser la diferencia entre un buen y un mal descanso, y para los bebés recién nacidos no es diferente.
Los bebés recién nacidos, más allá de que duerman más o menos cómodos, que lo hagan en una postura u otra puede suponer una exposición a problemas de salud. Con ello, hay 3 posiciones principales en las que se suele hacer dormir a los lactantes:
- Posición de espalda o boca arriba
- Posición de lado
- Boca abajo
Ventajas y riesgos de dormir a un bebé recién nacido en diferentes posiciones
Las 3 posiciones antes mencionadas tienen ventajas y riesgos, no obstante, la Asociación Española de Pediatría establece que la mejor posición para hacer que un bebé recién nacido duerma es la “posición de espalda” o boca arriba. Al mismo tiempo, y siempre que se pueda, se debe de evitar que los bebés duerman boca abajo.
Posición de Espalda
Según los expertos, la posición más adecuada para que un bebé recién nacido duerma es boca arriba debido a que es la posición más segura para el mismo. Uno de los posibles riesgos o problemas de salud a los que se enfrentan los bebés recién nacidos es al síndrome de muerte súbita del lactante. Este síndrome básicamente produce el fallecimiento de bebés, que parecen sanos, mientras duermen. Las causas del síndrome de muerte súbita del lactante aun se desconocen, pero estudios indican que la posición en la que duerma el lactante podría evitar muchos riesgos. Con todo ello, que un bebé duerma con la espalda apoyada hará que tenga las vías respiratorias bien abiertas y que pueda respirar sin problemas.
Aun así, esta posición también está causando problemas en algunos bebés recién nacidos. Los bebés en sus primeros meses de vida no tienen el craneo totalmente formado. Por ello, el hecho de que duerman siempre con la espalda apoyada puede generar que sufra “plagiocefalia posicional”, una deformidad de la parte trasera de su cabeza que se caracteriza por el achatamiento de la misma.
Posición de lado
La posición de lado es una buena alternativa a la posición de espalda si se quiere que el niño duerma en otra posición para evitar posibles deformidades en su cráneo y sus consecuencias. A pesar de ello, el riesgo de que un bebé recién nacido durmiendo en esta posición sufra el síndrome de muerte súbita del lactante es muy alto. Con ello, en caso de que se decida que un bebé descanse en esta posición, es recomendable mover el brazo que quede pegado al colchón del lactante para así impedir que se pueda mover a una posición en la que quede boca abajo.
Posición boca abajo
Esta posición era la recomendada en los años noventa por los expertos. Su uso pasó a ser considerado peligroso cuando distintos estudios revelaron un incremento de casos de lactantes que habían sufrido el síndrome de muerte súbita del lactante cuando dormían en esta posición. El hecho de que se vincule a esta posición con el mencionado síndrome se debe a que el bebé cuando está boca abajo puede tener sus vías respiratorias obstruidas. Con ello, la cantidad de oxigeno que inhala puede verse reducida, llegando a la asfixia.
Otras recomendaciones para el descanso de los recién nacidos
No cabe duda de que la posición en la que los bebés recién nacidos duerman es de vital importancia, pero no es el único factor para evitar riesgos o para hacer que obtengan un buen descanso. Otras recomendaciones que dan los expertos son:
- Evitar colchones blandos
- No tener objetos en la cuna (pueden obstruir sus vías)
- No compartir la cama con ningún bebé
